La trayectoria musical de Alastis es un ejemplo de evolución y búsqueda; se trata de una banda que, aunque se formó en la línea del Black Metal de los noventas, encontró tal vez su sonido más original a partir del lanzamiento de este, su tercer disco, The Other Side, en el que su propuesta podría catalogarse más acertadamente como Doom/Dark Metal. Una transformación que, sin duda, no vino bien a los ojos de muchos fanáticos, atrincherados todos en la época de The Just Law (1992), y que no entendían cómo una agrupación que había editado un álbum tan crudo como aquel, presentaba ahora una pieza más cercana al sonido medial de Samael o Gardens of Gehenna.

Sin embargo, para quienes no es interesante escuchar un grupo a lo largo de diez años tocando en el mismo estilo, The Other Side ofrece la oportunidad de conocer un cambio único. De la mano de Waldemar Sorychta (productor de bandas como Rotting Christ, Tiamat, Sentenced, The Gathering o la mencionada Samael), Alastis alcanza en este disco un planteamiento sin precedentes: una música lenta, que no supera jamás los medios tiempos; con estructuras de guitarra fuertes y depresivas a un mismo tiempo; una ambientación de teclados sombría e intensa; y unas growls profundas, perfectamente ejecutadas que, de tanto en tanto, se mezclan con los fragementos de voces limpias.

Un sonido increíble, armónico, en medio del cual se levanta otro planteamiento, no menos logrado, como lo es el conceptual, que permite sustentar mejor la idea de que estamos frente a un disco de Doom/Dark Metal. Y es que las letras de Alastis, unas veces se interrogan por los puntos ciegos del universo, sus enigmas (como sucede en "In Darkness" o "Never Again", canciones imprescindibles del álbum) y, otras veces, presentan una visión pesimista de la existencia (tipo "Fight and Win" o "Remind"). Con todo, aún pueden percibirse los rastros del pasado de la banda en un track como "Out of Time", en el que la pregunta por la eternidad remite a considerar la fe cristiana como respuesta.

The Other Side fue lanzado en Estados Unidos y Alemania por la Century Media Records. En la fotografía se muestra la primera edición americana (catálogo 7856-2), la cual se caracteriza por su excelente presentación: un booklet que incluye las letras de las canciones, información técnica y los agradecimientos de la banda. En el reverso del cuadernillo se encuentra la misma foto de la portada, pero sin la puerta abierta, es decir, vista desde el otro lado; un diseño sencillo pero efectivo, en términos de lo que desea transmitir Alastis. La Century Media también prensó (en 1997) 500 copias del disco en LP pero, al parecer, desde entonces, no han habido re-ediciones del mismo, ni en ese formato ni en CD.